Nuevo ebook de Onduline: Cubiertas inclinadas, cómo elegir entre un sistema integral y un sistema tipo SATE
- Publicado en Aislamiento y Humedad
La elección del sistema constructivo para una cubierta inclinada es una decisión clave que influye en su durabilidad, eficiencia energética y coste. Sin embargo, no siempre resulta evidente qué solución es la más adecuada, ya que factores como el uso previsto del bajo cubierta, la climatología, la geometría del tejado, las exigencias normativas o la existencia de un soporte previo condicionan el diseño final.




La rehabilitación energética de cubiertas es una de las intervenciones más efectivas para mejorar la eficiencia de un edificio y avanzar hacia un modelo constructivo más sostenible. Sin embargo, calcular correctamente el presupuesto es clave para evitar desviaciones económicas y garantizar la viabilidad del proyecto.
En el ámbito de la construcción y la rehabilitación de tejados, las placas bajo teja se consolidan como una de las soluciones más eficaces para reforzar la impermeabilización y prolongar la vida útil de las cubiertas inclinadas. Se trata de un material ligero, ondulado e impermeable que, instalado bajo la teja o pizarra, crea una cámara de ventilación y actúa como segunda barrera frente a filtraciones y humedades.
¿Estás buscando mejorar la eficiencia energética en tus proyectos de construcción y rehabilitación de cubiertas de teja?
Los tejados o cubiertas inclinadas de teja son elementos constructivos diseñados para proteger a las personas y sus viviendas frente a las condiciones climatológicas externos. Sin embargo, como explica Onduline, la pendiente y la cobertura con tejas puede no ser suficiente para evitar daños derivados de estos agentes externos a los que se ven expuestos los distintos materiales que forman las cubiertas.

