Pero si eres de los que baja el aire a 21º C y se tapa con una manta en pleno julio, tenemos malas noticias: cada grado de más que pides al equipo de climatización, puede aumentar el consumo hasta un 8%. La buena noticia es que no es necesario llegar a esos extremos para estar bien.

Menos, es más: el arte de climatizar con inteligencia

Combatir el calor no significa convertir tu casa en una nevera. De hecho, lo mejor que puedes hacer es jugar con la diferencia térmica: entre 6 y 12 grados respecto al exterior es lo ideal para evitar shocks térmicos y cuidar tu salud.

Además, distribuir bien la climatización por zonas (porque no necesitas la misma temperatura en la cocina que en el dormitorio) y dejar que circule el aire cuando refresca, son hábitos sencillos que marcan la diferencia. Si a eso le sumas un buen aislamiento térmico, te darás cuenta de que estar fresquito no es cuestión de potencia, sino de estrategia.

Ahora bien, antes de adquirir un sistema de climatización, es esencial analizar algunos de los factores clave que aseguran confort, eficiencia y adaptabilidad a las necesidades de cada vivienda:

1. Número de estancias a climatizar

El primer paso es determinar cuántas habitaciones necesitas climatizar. Para una sola estancia, un sistema Mono Split —compuesto por una unidad interior y otra exterior— suele ser la opción más eficiente. Si deseas enfriar dos ambientes, como un salón y un dormitorio, conviene optar por un Multi Split con dos unidades interiores conectadas a una sola unidad exterior.

En viviendas más amplias que requieren climatizar tres o más espacios, la solución puede ser un sistema Multi Splitmás completo (3×1, 4×1, 5×1) o bien un sistema de aire acondicionado por conductos, ideal para una cobertura más homogénea.

2. Tamaño de la superficie

La potencia del equipo debe ser adecuada a la superficie a enfriar. En general, se estiman entre 100 y 140 frigorías por metro cuadrado. Por ejemplo, para un espacio de 30 m² se necesita un equipo que proporcione entre 3.000 y 4.000 frigorías. Factores como el aislamiento de la vivienda, la orientación, el tipo de ventanas o la ubicación geográfica también influyen en esta elección.

3. Eficiencia energética

La etiqueta energética del equipo ofrece información valiosa sobre su rendimiento. Los modelos más eficientes cuentan con clasificación A+++, tanto en refrigeración como en calefacción, no hay que olvidar que estos equipos también aportan confort en invierno.

El índice SEER mide la eficiencia en modo frío y el SCOP en modo calor: cuanto mayores son estos valores, menor será el consumo eléctrico para mantener el confort.

¿Y si tu casa fuera capaz de entenderte?

La tecnología también juega a tu favor. Hoy existen soluciones inteligentes que no solo enfrían, sino que aprenden de ti, de tus horarios, de tus rutinas y de tus preferencias para mantener siempre el confort perfecto con la mínima energía posible.

Es aquí donde entra la innovación de Bosch Home Comfort. Porque no se trata solo de proponer tener aire acondicionado en el hogar, sino de ofrecerte una experiencia de climatización a medida, sostenible, inteligente y que respeta tu estilo de vida (y tu bolsillo).

Por ello, este verano, el mejor plan empieza en casa. Para ello, debes conocer cómo hacerlo con soluciones de climatización inteligente, pensadas para todo tipo de hogares:

• No estamos siempre…hablamos de las segundas residencias. Modelos como Bosch Climate 3000i, resultan ideales para hogares de uso estacional como segundas residencias en la playa, ya que combinan un diseño moderno con funcionalidad y eficiencia. Con potencias desde 2.6 hasta 7.0 kW, y control inteligente desde el móvil a través de la app Bosch HomeCom Easy, es la opción perfecta para quienes buscan frescor sin complicaciones… y sin renunciar al estilo.
• ¿Quieres algo más sofisticado? El Climate 7000i eleva la climatización a otro nivel, con WiFi integrado, un sistema avanzado de filtrado por iones que mejora la calidad del aire, y un diseño de la unidad interior premiado con el iF Design Award 2025. Disponible también en tres colores y potencias de hasta 7.0 kW, este modelo no solo enfría o calienta: transforma el confort en una experiencia personalizada y conectada.

Ambos modelos, además, son compatibles con asistentes de voz inteligentes, lo que permite ajustar la temperatura con solo decirlo.

Saber cómo mantener una temperatura estable y eficiente en casa es el primer paso para un verano sin sobresaltos. El segundo, es contar con tecnología que te lo ponga fácil.

Prueba la herramienta de realidad aumentada y visualiza en 3D los sistemas de aire acondicionado Climate integrados en tu hogar en:

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