Bomba de calor para agua caliente sanitaria: qué debes saber
- Escrito por María Domínguez
Una bomba de calor para agua caliente sanitaria (ACS) es una tecnología para la producción de agua caliente sanitaria, que consigue importantes ahorros energéticos respecto a otros sistemas de acumulación y producción de agua caliente. Su apariencia es similar a la de un termo o acumulador de agua caliente y su instalación resulta relativamente sencilla, ya que es un sistema compacto que se instala en el interior de la vivienda.
Sin duda, una bomba de calor para ACS puede ser la solución eficiente y renovable que estás buscando para generar agua caliente en tu hogar.
Aerotermia para la producción de ACS
Las bombas de calor para ACS utilizan la energía contenida en el aire (aerotermia) para el calentamiento de agua caliente. De esta forma, gran parte de la energía empleada es de origen renovable y sin coste. Esta es una de las razones por las que las bombas de calor para ACS son una solución eficiente y respetuosa con el medio ambiente para disponer de agua caliente sanitaria en el hogar.
Se calcula que el ahorro energético que consiguen respecto a un termo eléctrico es entre el 50- 75%, dependiendo del coeficiente de eficiencia energética en modo calefacción (COP) que tenga la bomba de calor. Este valor indica el rendimiento energético que consigue, e influye en el consumo energético derivado del sistema de calefacción.
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¿Cómo funciona una bomba de calor para ACS?
La bomba de calor para ACS se compone de un acumulador de agua vertical y una bomba de calor aire-agua en su parte superior. La bomba de calor calienta el agua fría mediante un serpentín condensador en el interior del acumulador. El evaporador toma el aire del exterior o del local donde se instale. Lo logra mediante dos conductos, uno de entrada y otro de salida de aire.
También se puede instalar un equipo sin conductos tomando directamente el aire del local donde se instala, pero lo más recomendable es que recoja el aire del exterior, para que se renueve. Utiliza el ciclo termodinámico para el calentamiento de agua y, como hemos dicho anteriormente, lo hace a través de la energía aerotérmica.
¿Cuándo elegir una bomba de calor para producción de agua caliente?
No tener acceso al suministro de gas natural o propano en la zona de la vivienda es una razón más que suficiente para decantarse por un sistema más eficiente que no esté sujeto a los cambios en el precio de la electricidad. Aunque la bomba de calor también está conectada a la red eléctrica, cerca de tres cuartos de la energía que genera procede de la energía contenida en el aire. Por esta razón su consumo energético se reduce considerablemente.
Si el edificio es nuevo, ten en cuenta que el Código Técnico de la edificación (CTE) recoge la obligatoriedad de instalar en edificios nuevos equipos que usen fuentes de energías renovables. En este caso, la instalación de una bomba de calor para ACS puede ser también una alternativa a la energía solar térmica, ya que la Directiva Europea 2008-0016 considera como energía renovable unos rendimientos mínimos a partir de 2,5 de coeficiente estacional de rendimiento de calefacción (SCOP). Así, a partir de esos niveles, una bomba de calor cuenta como energía renovable y puede ser empleada para cumplir con los requisitos del CTE.
¿Cuáles son las ventajas de las bombas de calor para ACS?
Alta eficiencia energética
Fíjate en el COP de la bomba de calor para ACS. Al emplear la aerotermia para el calentamiento de agua, hay que tener en cuenta que este coeficiente nos informa sobre el rendimiento energético del equipo. Para que rinda al máximo en todo tipo de condiciones climáticas, el COP de la bomba de calor tiene que ser alto. Actualmente, la mayoría de los fabricantes de bombas de calor ofrecen equipos con COP mayores de 3, 3,6 e incluso 4.
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En zonas con climas muy fríos puede verse reducido el rendimiento energético de la bomba de calor para ACS. Por este motivo, también es conveniente fijarse en otro tipo de características como pueden ser el modo boost. Este modo incluye una resistencia eléctrica como apoyo al calentamiento de agua caliente, para disponer de ella en todo momento y poder calentarla rápidamente si fuera necesario.
Grandes volúmenes de acumulación
Dependiendo de las necesidades de agua caliente sanitaria optaremos por unos volúmenes u otros. Lo positivo es que encontramos en el mercado todo tipo de modelos que se adaptan a las necesidades de agua y consumo de cada vivienda.
Facilidad de instalación
Como hemos mencionado anteriormente, las bombas de calor para ACS son similares estéticamente a los termos eléctricos. Así, se instalan en el interior de la vivienda, habitualmente en armarios. Se recomienda colocarlos cerca del punto de consumo (baño-cocina).
Ahorro energético respecto a un termo eléctrico
El ahorro que se consigue al cambiar de termo eléctrico a bomba de calor resulta muy significativo. Como señalábamos, la bomba de calor para ACS calienta el agua mediante aerotermia, por lo que el ahorro de energía es muy relevante. De esta forma, aunque el precio es mucho mayor que el de un termo, la inversión se amortiza en un plazo corto.
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