Treinta años dan para mucho. Para medio millón de productos vendidos. Para consolidar un liderazgo en soluciones de calefacción eficientes. Para mantener un crecimiento sostenido en un mercado exigente como el español. Pero, sobre todo, dan para algo más difícil de medir: la confianza ganada con el instalador, el verdadero embajador de la marca ante el usuario final.

El evento de celebración, que reunió a buena parte del equipo directivo de Ariston España y Europa, así como a profesionales del sector, fue más que un repaso a la trayectoria de la compañía: fue una declaración de intenciones sobre cómo piensan seguir creciendo.

Un propósito claro: mejorar la vida de las personas

Rubén Santos, director general de Ariston España, abrió la jornada con un mensaje claro: “Nuestro propósito sigue siendo mejorar la vida de las personas, y hoy es más necesario que nunca”. Con una facturación global de 2.600 millones de euros y una plantilla de más de 10.000 empleados, Ariston es un actor clave a nivel internacional. Pero no pierde el foco local: solo en España, la compañía alcanzó en 2024 una facturación de 104 millones de euros.

Mauricio Brusadelli, CEO de Ariston Group, envió un mensaje de felicitación que no solo miró al pasado, sino que puso el acento en la innovación y la digitalización como motores del futuro. La apuesta firme por tecnologías como la aerotermia multitarea y la implementación de herramientas digitales para facilitar el trabajo al profesional definen la hoja de ruta de la marca para los próximos años.

Tres pilares para un liderazgo sostenible

Anna Sayeras, responsable de marketing y producto, desglosó los tres pilares que definen la diferencia Ariston:

1. Pertenencia global, atención local. Formar parte de un grupo internacional permite a Ariston acceder a recursos y conocimiento, pero su cercanía con el mercado español les permite adaptar soluciones y establecer una relación directa con los profesionales del sector.
   
   
2. Crecimiento sostenible. No solo en términos de negocio, sino también desde una visión tecnológica y ambiental. Ariston apuesta desde hace años por soluciones que reducen el impacto medioambiental, como la hibridación o la aerotermia. La reciente adquisición de Centrotec Climate Systems, y con ella marcas como Wolf, refuerza su capacidad de ofrecer una oferta completa y adaptada a todas las necesidades.
   
   
3. Aportar valor real al mercado. Ariston no solo sigue tendencias: aspira a liderarlas. Y lo hace, según Sayeras, escuchando al profesional, facilitando su trabajo y acompañándolo en el proceso comercial, técnico y administrativo.
   
   

ARI PAY: menos burocracia, más eficiencia para el instalador

Uno de los puntos más destacados del evento fue la presentación de ARI PAY, la herramienta digital de Ariston para gestionar los Certificados de Ahorro Energético (CAE). Esta solución permite ofrecer al usuario final descuentos de hasta el 70% por la instalación de sistemas de aerotermia, con una gestión ágil y el cobro inmediato para el instalador.

Durante la mesa redonda dedicada a esta cuestión, varios expertos coincidieron en que el gran reto para implementar los CAE en el sector residencial es la falta de tiempo y recursos de los instaladores. “Si hay algo que no tiene el instalador, es tiempo”, apuntaba Díaz, consultor especializado en calefacción y fontanería. Herramientas como ARI PAY simplifican el proceso, garantizan el cumplimiento legal y, además, generan nuevas oportunidades de negocio para el profesional.

David Díaz, director de servicios energéticos de Total Energies, subrayó el valor de este sistema como sujeto obligado dentro del marco de los CAE, y destacó su eficacia como aliado comercial y técnico.

La colaboración como ventaja competitiva

Uno de los mensajes más potentes de la jornada vino también de la mano de Emilio Díaz, quien propuso una visión poco habitual en el sector: la colaboración como motor de crecimiento. “Podemos pelearnos por el reparto o trabajar juntos para hacer la tarta más grande”, sentenció. Para ello, propuso tres pilares: voluntad, selección y confianza, y cuatro pasos para que la colaboración no se quede en buenas intenciones: alinear intereses, lanzar un piloto, formalizar acuerdos y hacer seguimiento real.

La filosofía de Ariston va en esa línea: apostar por relaciones duraderas con distribuidores, instaladores y partners tecnológicos, donde el beneficio no se mida solo en márgenes, sino en valor añadido compartido.

De 1995 al futuro: un equipo con historia

Uno de los momentos más emotivos del evento fue el simbólico relevo entre Lluís Folch, con 30 años en la compañía, y Joel Villamayor, una de las últimas incorporaciones al departamento de marketing y producto. Una forma de homenajear el camino recorrido y poner la vista en el futuro, que pasa claramente por las energías renovables.

Con más de 15.000 unidades de aerotermia instaladas en España y un crecimiento imparable en este segmento, Ariston se posiciona como referente en soluciones sostenibles y eficientes. Cada segundo se vende un producto Ariston en algún lugar del mundo. Pero, como señaló Benito Cantalejo, director comercial, “lo importante no es solo cuánto vendemos, sino cómo lo hacemos, con quién, y para quién”.

Mirando al futuro, con determinación

El evento concluyó con un emotivo vídeo de homenaje a los instaladores, cediéndoles el protagonismo de estos 30 años. Porque sin ellos, ninguna tecnología llega a buen puerto.

Rubén Santos cerró el acto con una frase que resume el espíritu de la jornada: “Miramos al futuro con determinación. Y sabemos que solo se construye con aliados que comparten nuestra visión”.

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