COP25 en Madrid: los sectores de calefacción y refrigeración frente al Cambio Climático

Con los planes para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEIs) presentados hasta ahora por los países firmantes de este Acuerdo de París no será posible conseguir sus objetivos. Además, recientemente, el gobierno de Estados Unidos acaba de iniciar los trámites para desvincularse de este Acuerdo. Por ello, urge incrementar el nivel de ambición en la lucha frente al Cambio Climático e implicar a todos los sectores y agentes de la sociedad sin cuya colaboración no va ser posible hacer frente a éste que sin duda es uno los principales retos que tiene que afrontar nuestra sociedad.

El marco español de legislación y planificación, actualmente en fase de elaboración, se encuentra alineado con este necesario incremento en el nivel ambición en la lucha frente al cambio climático siendo los tres pilares del mismo:

• La ley de Cambio Climático y Transición Energética,
• El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030,
• La Estrategia de Transición Justa.

A través de este marco se garantiza la necesaria certidumbre para todos los agentes, sobre todo del sector privado, de cara a movilizar inversiones hacia la necesaria descarbonización de nuestra economía. 

Este Marco se complementa con la Estrategia 2050, cuya versión definitiva se presentará a la Comisión Europea a finales de año, que busca llevar a la economía española a la a neutralidad climática en 2050 de tal forma que las emisiones GEIs se compensen con acciones de sumidero de carbono (como la reforestación de terrenos), además de fijar como objetivo que el 100% de energía eléctrica sea renovable en ese horizonte.

Asimismo, el Plan Integrado de Energía y Clima 2021-2030 tiene como finalidad la reducción de al menos un 20% de emisiones de GEIs (con respecto a los niveles de 1990), lo cual se alcanza con un sustancial aumento de la participación de energías renovables y de generación eléctrica renovable.

La importancia de los sectores de calefacción y refrigeración en este contexto

Así, las emisiones del sector residencial, comercial e institucional en el año 2017 (según datos del Inventario Nacional de Emisiones) asociadas al uso de combustibles fósiles para necesidades térmicas (calefacción y agua sanitaria), representan unos 29 Millones de ton CO2-eq (8% de las emisiones totales de España) mientras que las emisiones por fugas de gases fluorados en equipos de refrigeración y climatización alcanzaron, aproximadamente, los 6,7 Millones, (2% del total). A ello, habría que añadir las emisiones indirectas relacionadas con la generación de la electricidad utilizada por los dispositivos de refrigeración y ciertos aparatos de calefacción (eléctricos) y bombas de calor.

Las principales medidas contempladas, en estos sectores, dentro del borrador del Plan Integrado de Energía y Clima 2021-2030 se centran en mejorar la eficiencia energética (envolvente térmica) de cerca de las 1.200.000 viviendas durante esta década y la renovación de instalaciones térmicas y de agua sanitaria de 300.000 viviendas al año. 

En el sector de la refrigeración se da continuidad a las medidas desarrolladas en los últimos años como el impuesto nacional a los gases fluorados de efecto invernadero, aprobado en el artículo 5 de la ley 16/2013 o el sistema nacional de formación y certificación en gases fluorados, contemplado en R.D. 115/2017 y que consiguieron una significativa reducción de emisiones en los últimos años (> 50%) por la sustitución de refrigerantes fluorados de alto potencial de calentamiento por refrigerantes naturales (CO2, HC y NH3) y refrigerantes fluorados de bajo potencial de calentamiento. A su vez, se articulan medidas de mejora de la eficiencia energética en los equipos de refrigeración, como su renovación por otros equipos más eficientes.

Dentro de este contexto internacional, España se ha puesto como ejemplo de buena práctica dentro de Naciones Unidas en lo que atañe a sus políticas de mitigación de GEIs en el sector de la refrigeración encontrándose dentro de los veinte países que, hasta la fecha, se ha adherido a la “Cool Coalition” que se lanzó en la última Cumbre de Acción Climática que tuvo lugar en septiembre de 2019 en Nueva York y que conforma una Coalición para la Refrigeración Limpia y Eficiente y ha suscrito, recientemente, la Declaración de Roma referida a la contribución del Protocolo de Montreal para la reducción del desperdicio alimentario a través de una cadena de frío más sostenible. 

El éxito de esta COP25 vendrá determinado por nivel de ambición que muestren cada de unas partes en materia de lucha contra el cambio climatico. En este sentido hay que destacar que la Unión Europea se ha convertido en la primera región del mundo en declarar la emergencia climática a través de la declaración que realizó su parlamento la semana pasada.

Artículo redactado por Guillermo Martínez López, Consejero Técnico de la Oficina Española de Cambio Climático para Caloryfrio.com