Se trata de una vivienda unifamiliar que mejora su comportamiento energético actuando en tres frentes clave y poco visibles: aislamiento por insuflado en las cámaras de aire de fachada, instalación de aislamiento térmico en falso techo y colocación de aislamiento bajo la solera. Todo ello, con soluciones pensadas para no interferir en la estética ni en el uso diario de la vivienda durante la intervención.

A partir de una simulación energética detallada del estado previo y posterior a la rehabilitación, el estudio analiza cómo estas mejoras impactan en la demanda de calefacción y refrigeración. Las conclusiones hablan por sí solas: hasta un 45% de reducción en el consumo energético, disminución drástica de puentes térmicos y un notable incremento del confort térmico en todas las estancias.

Rehabilitación que se nota en la factura

Si bien el impacto térmico es inmediato, el impacto económico también se hace notar. En zonas frías como Ávila, León o Teruel, el ahorro en calefacción ronda el 50%. En climas más templados como Castellón o Huelva, se reduce considerablemente el uso del aire acondicionado en verano, con ahorros superiores al 35%. Cada euro invertido se traduce en eficiencia duradera.

Resultados y Beneficios

Los resultados del estudio revelan un impacto inmediato y medible en varios aspectos clave:

• Demanda energética: La actuación combinada en fachada, techo y solera permite reducir hasta un 45% el consumo total destinado a climatización.
• Confort térmico: Las estancias presentan temperaturas más estables y homogéneas, reduciendo la sensación de frío en invierno y de sobrecalentamiento en verano.
• Puentes térmicos: Su eliminación contribuye no solo al ahorro, sino también a evitar patologías como condensaciones o humedades.
• Impacto ambiental: Al disminuir la demanda de energía, se reducen también las emisiones asociadas al uso de combustibles fósiles, contribuyendo a una vivienda más sostenible.

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Soluciones URSA utilizadas

Para esta intervención se han aplicado distintas soluciones de la gama URSA:

• Fachada: insuflación de Lana Mineral URSA PUREONE Pure Floc KD 100mm en las cámaras de aire de las fachadas. Ideal para insuflado por su baja conductividad térmica, comportamiento acústico y adaptabilidad a las cámaras existentes.
• Bajo cubierta: La incorporación de un falso techo con aislamiento URSA TERRA PLUS 32 T0003 de 100 mmgracias a su comportamiento térmico y acústico
• Solera: La instalación de un aislante URSA XPS NIII de 90/100 /120 mm. Aplicado en cubierta, destaca por su resistencia mecánica y durabilidad, incluso en condiciones exigentes.

Rehabilitar una vivienda unifamiliar sin tocar su envolvente exterior es posible. Y no solo eso: puede ser una de las formas más efectivas de mejorar su eficiencia, reducir su huella de carbono y aumentar el confort interior. Apostar por soluciones como las de URSA  es una apuesta por una forma de vivir más responsable, saludable y preparada para el futuro.

Puedes ver, a continuación, pudes ver un ejemplo de instalación de los paneles URSA TERRA PLUS 32: 

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www.ursa.es