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Errores en la reforma del baño que te costarán dinero y tiempo

Errores más comunes en la reforma del cuarto de bañoRenovar el cuarto de baño es un excelente punto de partida para iniciar las reformas de tu hogar. Esto no quiere decir que sea el más sencillo, así que asegúrate de planificarlo muy bien. Los errores siempre cuestan dinero y en el caso de una estancia en la que hay presencia de agua pueden, además, darnos muchos dolores de cabeza.

Para ayudarte a que consigas a la primera el baño de tus sueños y evitarte la pesadilla de ir tropezando con todo lo que no deseas que te pase durante la reforma (o incluso después), te propongo que revises este listado de los errores más frecuentes que se suelen cometer.

Los errores que no quieres cometer cuando renueves tu cuarto de baño

Las prisas

Para el aspecto estético y de diseño, si no has decidido contratar a un interiorista empieza con calma a coger ideas de publicaciones especializadas que te inspiren sobre el estilo que quieres darle, colores, materiales etc.

En cuanto a los planos, para ubicar las distintas piezas del cuarto de baño es recomendable pensar en un diseño que mantenga las tuberías principales en su sitio. Cambiar de lugar el lavabo o la ducha/bañera supondrá reubicar las tuberías lo cual redundará en un incremento de costes. En el caso del inodoro, la cosa se complica ya que según el CTE (Código Técnico de la Edificación) el inodoro debe estar a 1m de distancia de la bajante pero si no es posible, habría que darle al tubo de aguas negras una pendiente mínima del 2% (aunque lo ideal sería un 3%).

Asegúrate de antemano de disponer de suficiente espacio alrededor de cada accesorio para un uso cómodo. No tiene sentido comprar el lavamanos que tanto te gusta si vas a estar constantemente tropezándote con él cuando te muevas por el baño. Si tienes un baño pequeño y el espacio realmente es un problema, busca productos con menos fondo. Y si realmente no puedes vivir sin un lavabo más grande, considera sacrificar la bañera y colocar una ducha.

Ya sea porque estás deseando ver cómo queda terminado, porque te supone una incomodidad tener obras en casa o incluso porque lo necesitas, no esperes que la obra esté finalizada en dos días. Una mala planificación en la ejecución, es la causa principal del incremento de costes en este tipo de reformas. Y no hay nada que salga más caro que tener que hacer las cosas dos veces. Dependiendo del tamaño de tu cuarto de baño o de la magnitud de la reforma que vas a realizar, puede llevarte varias semanas tener el proyecto finalizado. 

Ahorrar en la mano de obra especializada

Es indudable que hacerlo uno mismo siempre es una manera de ahorrar, pero este tipo de reforma conlleva instalaciones complejas que requieren de las habilidades de un profesional cualificado. Hay labores en las que podremos colaborar si ese es nuestro deseo, pero las tareas más especializadas siempre deben recaer en manos expertas. Puedes gastarte un dineral en un cerámico carísimo, pero si está mal colocado no lucirá, parecerá barato e incluso su durabilidad no será la misma.

Los problemas de tuberías suelen ser todo un quebradero de cabeza, y lo último que desearemos será tener que picar los cerámicos del suelo o los azulejos de las paredes por este motivo.

Además, en el caso específico de esta estancia de la casa se junta la necesidad de trabajar con varios oficios diferentes como fontanería, electricidad y albañilería por lo que la mejor opción será recurrir a los servicios de un contratista para que gestione la obra de manera integral. Contacta al menos con tres de ellos, que te hayan recomendado amigos o familiares antes de decidirte por uno. Y cuando lo hagas, examina el contrato donde debería adjuntarse un listado pormenorizado con los acabados, modelos que hayáis acordado, etc. No te decidas directamente por el que te ofrezca el precio más bajo sin analizar las demás propuestas ya que puede haber referencias que no estén detalladas y resulten en un coste posterior. 

Lo barato sale caro

Otro de los errores más comunes es el que cometemos al tratar de ahorrar en aquello que más vamos a utilizar.

Cuando se trata de elegir materiales para el baño, si éste es de uso diario, la practicidad debería ser la mayor prioridad. Como la habitación más húmeda de la casa, necesita elementos resistentes, higiénicos y fáciles de limpiar.

Los sanitarios generalmente están fabricados con cerámica o porcelana, si bien en los últimos tiempos se han introducido nuevos diseños en otros materiales como las fibras sintéticas, el acero inoxidable o incluso el vidrio. Si acostumbramos a utilizar productos para la limpieza y desinfección que sean muy agresivos o estropajos duros, debemos asegurarnos que el material que escojamos sea resistente a este tipo de prácticas de limpieza. De lo contrario, podrán aparecer manchas o rayaduras en un corto periodo de tiempo.

El mármol o la madera son materiales que nos parecen maravillosos para el lavamanos, pero requieren de manteniendo. Si no confías en que los pequeñajos de la casa limpien la superficie cuando se moje, con el tiempo podrían salirle manchas.

Con los acabados de paredes y suelo nos sucederá lo mismo. Las opciones de que disponemos hoy en día son enormes, desde el azulejo de toda la vida al microcemento, pasando por la piedra natural. Tanto la calidad del material como una buena colocación nos evitarán roturas o desconchones. Podemos encontrar azulejos desde 10 €/m2, pero convendrá asegurarnos, por ejemplo, de que no tienen inconsistencias en el tamaño, ya que unas líneas torcidas harán que el suelo parezca de mala calidad.

Si vamos a instalar suelo radiante, es imperativo que nos aseguremos de que el material que elijamos para el suelo sea compatible.

Almacenaje

Artículos de tocador, toallas, papel higiénico, productos de limpieza… no cabe duda de que los baños necesitan un espacio considerable de almacenamiento. Podríamos renunciar a colocar armarios o gabinetes y guardar todo en otra zona de nuestra casa, pero los paseos de ida y vuelta para reponer lo que necesitemos terminarán siendo agotadores.

A todos nos suele gustar ese aspecto minimalista en el baño, pero la realidad para la mayoría de nosotros es mucho más práctica y debería ser apropiada para el uso diario.

Los muebles hechos a medida son una excelente elección, ya que utilizan cada centímetro del espacio, por lo que si el baño es pequeño, se puede maximizar mucho el almacenamiento.

En definitiva, un armario dentro del baño es lo ideal, incluso si es de pequeñas dimensiones. Podremos guardar las cosas de más uso y nos permitirá, además, mantener despejada la superficie del lavamanos. Un menor “ruido visual” hará que nuestro baño parezca más limpio y espacios

Ventilación e iluminación

En todas las dependencias de nuestro hogar debemos contar con una buena ventilación, y en el caso del cuarto de baño no sólo no es una excepción, sino que por los malos olores y la humedad, se necesitan sistemas de ventilación especiales para baños.

Una buena ventilación resulta esencial en cuartos de baño con las paredes de papel. Si bien a día de hoy el papel vinílico que existe en el mercado es de gran calidad, se reduce el riesgo de que se despegue o incluso peor, que desarrolle hongos.

Si no contamos con una ventilación adecuada, habrá condensación y antes o después comenzaremos a tener humedades.

Para evitarlo, el aire se debe renovar. Existen diversos tipos de aberturas de ventilación y de sistemas de extracción. Conviene consultar el CTE, en el apartado DB HS 3 Calidad del aire interior para contar con toda la información y seleccionar lo que mejor se adapta a nuestras necesidades.

Con respecto a la luz, la iluminación del baño necesita ser constante y adaptable a los distintos usos que hacemos de él, desde bañarnos y prepararnos por las mañanas hasta ser un espacio de relax al final del día. Si la iluminación es muy oscura, no nos veremos ni en el espejo y si es muy brillante no habrá manera de relajarnos.

Por lo tanto, el objetivo será disponer de distintos tipos de luminarias. Un accesorio de techo es adecuado para la iluminación general, pero proyectará sobras en nuestra cara cuando estemos arreglándonos frente al espejo. Será conveniente disponer de distintos apliques, LED u otros accesorios en la zona de baño, tocador e inodoro. Recuerda colocar un sistema que te permita regular la luz en función del uso que demos al espacio en cada momento.

Como consejo final para el diseño del baño, un buen punto de partida siempre es lo primero que se ve al entrar. Elije una pieza clave, ya sea una bañera exenta, un lavamanos llamativo o una ducha con un diseño original y, si el tamaño lo permite, traza un diseño simétrico tal vez alineado con una característica arquitectónica como una ventana. La ayuda de un especialista nos puede hacer ver más allá del diseño existente. Resulta sorprendente cómo incluso al baño más pequeño se le puede dar un gran cambio.

Y recuerda, al igual que sucede con cualquier otro proyecto de construcción o reforma, no trates de ajustar la obra exactamente al dinero de que dispones. Incluye siempre un margen de contingencia del 10-15%, porque nunca se sabe qué imprevistos te puedes encontrar una vez que empieces.

Modificado por última vez enViernes, 03 Junio 2022 13:25

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